La CDMX, primera a nivel internacional en contar con esquema de créditos para adultos mayores: estudio Cepal
La Ciudad de México es la primera a nivel internacional en contar con un esquema de créditos para adultos mayores, que permite a este sector de la población mejorar sus condiciones de salud y alimentación, pero también ejercer su derecho a la autonomía y dignidad.
Así lo establece el estudio Acceso de las personas mayores al crédito Pensión Alimentaria y derechos conexos en la Ciudad de México, preparado por la doctora Sandra Huenchuan, especialista en envejecimiento del Centro Latinoamericano y Caribeño de Demografía (CELADE)-División de Población de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de Naciones Unidas, bajo la supervisión del director del CELADE-CEPAL, Dirk Jaspers, y la secretaria de Desarrollo Social de la CDMX, Rosa Icela Rodríguez.
El documento, que es una publicación oficial de las Naciones Unidas y se realizó en el marco del convenio de asistencia técnica 2014-2015 de ambas instituciones, destaca que a nivel internacional existen diversas experiencias de medidas especiales y programas de acceso al crédito para la población adulta mayor.
“No obstante, se trata de una práctica poco común y que castiga a las personas mayores en relación al monto del crédito, las condiciones de pago, los intereses y las garantías”.
Como parte del estudio se examinó la situación de los adultos mayores a nivel internacional, con el fin de realizar un comparativo en materia de leyes y programas que se ocupan de esta población, donde la Ciudad de México, encabezada por el doctor Miguel Ángel Mancera, está a la vanguardia al garantizar, a través de la Pensión Alimentaria para Adultos Mayores, el derecho que tiene este sector a contar con créditos por hasta por cinco mil pesos, con tasa de interés de 1.8%.
Los programas de crédito que se ofrecen a los adultos mayores en otras partes del país, destaca, suelen variar montos y plazos de devolución de acuerdo con la edad y sus tasas de interés oscilan entre el 7% y el 30%, mientras que en las entidades privadas parten del 50% y pueden llegar hasta el 106%.
El estudio resalta que el programa de la Pensión Alimentaria, del Instituto para la Atención de los Adultos Mayores (IAAM), a cargo de Rocío Bárcena, tiene la capacidad de otorgar créditos a los adultos mayores, gracias a la política social que tiene el Gobierno de la CDMX, que se basa en la dignidad y los derechos humanos de las personas.
De acuerdo con Naciones Unidas, “la seguridad económica constituye una legítima aspiración en la vejez, tanto en el caso de una persona que ha contribuido durante toda su vida a la seguridad social como en el de otra que, por su trayectoria laboral o por otras razones, no cumple con los requisitos suficientes para acceder a una pensión contributiva”.
En el documento, se plantea la necesidad que existe de eliminar la discriminación que sufren las personas mayores en esta materia, la cual surge a partir de la asimilación de la edad avanzada a un mayor riesgo.
De acuerdo con las normas internacionales sobre derechos humanos, el acceso al crédito financiero sin discriminación es un derecho de los adultos mayores, vinculado al de tener una vida digna y de calidad, por lo que los Estados deben adoptar medidas especiales para asegurar su acceso.
Dentro de los resultados que arroja el estudio se tiene que en 2012, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF), aproximadamente el 34% de los adultos mayores del país utilizaba mecanismos alternativos para financiarse, entre ellos préstamos de familiares y amigos, cajas de ahorro, o recurrir al empeño de algún bien.
Además, sólo 30 de cada 100 personas de 65 a 70 años, entrevistadas, reportan tener alguna cuenta de ahorro, nómina, inversión u otra modalidad de servicio económico con alguna institución bancaria a nivel nacional.
Entre la población adulta mayor que no cuenta con una jubilación, el acceso a las cuentas bancarias se reduce a 20 de cada 100 individuos. En contraste, 66 de cada 100 personas mayores con pensión o jubilación, cuentan con acceso a los servicios de instituciones bancarias.
El estudio puede consultarse en la página de Internet
